No cabe duda de que padres, madres y educadores desempeñan un papel importante para desarrollar las capacidades de expresión y la comunicación entre todos los niños.
La música está presente en todo momento tanto en el aula como fuera de ella por lo que la utilizaremos como un recurso lúdico con la que los niños y las niñas se van a sentir muy motivados. Es importante porque a través de actividades musicales se llega a un desarrollo de la memoria, discriminación auditiva, atención y participación; es decir, la música abre un mundo de posibilidades en las aulas de educación infantil.
La mejor forma de practicar la música en educación infantil es a través de las canciones ya que ofrecen multitud de posibilidades educativas y sobre todo si éstas se apoyan con gestos, movimientos y palmadas.
Un aspecto importante a tener en cuenta es que el oído empieza a funcionar desde el 6º mes de vida prenatal y está estimulado por cualquier sonido. Teniendo esto en cuenta y siendo conscientes del placer que proporciona la música a niños y niñas en los primeros años de vida, la utilización de la misma de forma sistemática y planificada en el currículum de infantil, tiene una lógica y necesaria presencia.
La música en la etapa de E.I se puede trabajar de muchas maneras y haciendo que participen las familias. Podemos introducir en los juegos instrumentos musicales con los que estimularemos el desarrollo del niño y la niña.
Si sabemos la importancia que tiene la música para los niños y niñas, nuestra labor será despertar su interés y su curiosidad por la música.
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